15/2/09

GENE SIMMONS, DE KISS, MUEVE SU FAMOSA LENGUA PARA HABLAR


–¿Pensás en qué lugar ocupará KISS en la historia del rock?
–No sé, no me preocupa eso. A lo único a lo que le presto atención es a los fans, no a lo que piensa el resto del mundo. No es que a todos les gusta Jesucristo, tampoco, así que no podés preocuparte por gustarles a todos. Lo que sí sé es que cuando ves a los Stones, a Paul McCartney, a Nickelback o a cualquier banda, y hay fuegos artificiales sobre el escenario, vas a pensar: “Uh, igual que KISS”. Lo mismo si ponen un gran logo de la banda en el escenario o si montan todo un show teatral. Y la razón es que hace 35 años pensamos en el escenario como un lugar sagrado, la iglesia eléctrica, al que muy poca gente puede acceder. Nuestra responsabilidad cuando estamos ahí, por una cuestión de respeto y dignidad, es entregarle a la gente algo a la altura de lo que pagó. Porque cuando venís a un show de KISS también traés tus ojos, no sólo tus oídos. El 50 por ciento es para los oídos y el 50 por ciento para los ojos.
–¿O sea que sólo la mitad del fenómeno KISS tiene que ver con la música?
–Eso depende de cada fan. Lo que sí sé es que cuando fui a Guadalajara, México, a la entrega de los MTV Latinos, los premios que se llevaban los artistas eran mi lengua. Es por eso que tenemos una responsabilidad. Está muy bien ser los Ramones, los Sex Pistols, los Clash o la banda que sea, cada uno hace lo suyo. Nosotros tenemos una mirada más amplia: no es sólo cuestión de estar sobre el escenario, queremos estar en tu comida y en tu tarjeta de crédito, quiero que haya un planeta llamado KISS. Tenemos un apetito mucho mayor, no es sólo cuestión de música.
–Pero, después del ataúd KISS, ¿todavía hay alguna franquicia que les quede por inventar o ya las hicieron todas?
–Oh, no, hay muchas más... Este año vamos a sacar disfraces de KISS para niños, para que los chicos de 10 años puedan vestirse como nosotros, con las plataformas y el maquillaje. Y acabo de sacar el Gene Simmons Axe Controller, que se vende a través de mi página web: es como los controles para jugar al Rock Band o a Guitar Hero en la PlayStation o en la Wii, pero es más grande que las guitarras usuales que vienen para esos juegos. Se puede hacer cualquier cosa, es cuestión de imaginar.
–Pero debe ser difícil para vos encontrar nuevos desafíos: visto desde afuera, la sensación es que hiciste de todo.
–Todavía no. Quedan muchas cosas por hacer y hasta ahora me resulta muy divertido. Estamos por empezar el KISS Las Vegas Show en Tokio, vamos a hacer un dibujo animado de KISS... Podemos hacer de todo.
–Después de 35 años, ¿se mezclan en tu cabeza las imágenes de los shows o te acordás de cosas específicas de cada uno de ellos? Por ejemplo, de tus visitas a la Argentina.
–Lo que realmente recuerdo son las chicas. Tenemos videos de los shows y fotos... Cuando pasás algún tiempo con una o dos, te acordás de conversaciones, de comidas, de olores, de sabores. Y es por eso que yo saco fotos y atrás escribo los nombres de las chicas.
–Después de la gira sudamericana tenés que grabar la quinta temporada de tu reality, pero Paul (Stanley) y vos prometieron que este año finalmente habría un nuevo disco de estudio de KISS. ¿En qué quedó eso?
–Vamos a hacer un disco nuevo producido por Paul, porque yo no tengo la paciencia para meterme en un estudio y quedarme a vivir ahí durante seis meses. ¿Quién mejor que Paul para eso? La idea es hacer el disco rápido, como en la época de Destroyer, Rock And Roll Over y Love Gun. Pero para eso tenemos que estar preparados, así que ahora estamos trabajando en las canciones cuando tenemos tiempo. Quizás en marzo nos metamos en un estudio y grabemos dos o tres temas. La idea es trabajar así, de a poco, porque no podemos estar mucho tiempo en el estudio, tiene que ser rápido.
–Dijiste muchas veces que no iban a sacar material nuevo por la piratería online. ¿Se cansaron de esperar a que la industria discográfica encontrara una solución?
–La situación ha cambiado. Ahora podés comprar los discos de The Eagles y algunas otras bandas grandes en cadenas como Wal Mart o Best Buy. Ahora que vemos que es posible, vamos a sacar un disco nuevo. Si trabajás muy duramente y nadie paga por lo que hiciste porque directamente se lo roba, ¿por qué deberías trabajar?
–Ya que mencionás los “robos”, hay cierta controversia con la canción Outlaw Pete, de Bruce Springsteen, que se parece mucho a I was Made for Lovin’ you. ¿Escuchaste su tema?
–Por supuesto, es la misma melodía.
–¿Y van a hacer algo al respecto?
–No, Bruce necesita el dinero, vamos a dejarlo en paz (se ríe). Bruce es un buen tipo, quizá no la conocía, aunque es exactamente la misma melodía.
–Supongo que todo el mundo debe preguntarte esto, pero en todo caso insisto: ¿creés que será posible una gira más con la formación original de KISS?
–Bueno, todo es posible, pero Ace (Frehley) y Peter (Criss) han abusado de las drogas y el alcohol durante 30 años. Estar en KISS no es lo mismo que ser parte de los Stones, donde sólo necesitás tres chicas y una remera: para poder correr por el escenario en botas con plataforma tenés que ir al gimnasio todos los días. No sé si Peter y Ace puedan hacer eso...
–Más para Peter, que tiene que tocar la batería.
–Peter lleva treinta años siendo un borracho, así que lo dudo.
–¿Todavía te ves con ellos dos?
–¡No! Los invité a mi programa de televisión y ambos se negaron. Creo que ahora son más felices que cuando estaban en la banda, porque no tienen presión, pueden quedarse en casa, grabar demos en un estudio... No todo el mundo está hecho para las giras. En los tours, el único policía que tenés sos vos mismo, nadie más va a evitar que te drogues.
–¿Vos sí estás hecho para las giras?
–Yo estoy hecho para cualquier cosa que quiera hacer.
–Ahora Eric Singer y Tommy Thayer usan los maquillajes originales de Peter y Ace. ¿Imaginás un futuro en el que otro use tu traje para que la leyenda de KISS continúe?
–Sí.
–¿No sería demasiado extraño?
–Para nada. Tal vez sí para los viejos fans, pero no para los nuevos. Cuando vas a ver a los Stones y toca Ron Wood, vos no preguntás: “¿Quién es ese tipo?”. Pero cuando yo era más chico en los Stones tocaba Brian Jones y después Mick Taylor.
–Bueno, pero no hay otro Keith Richards, como no puede haber otro Gene Simmons. Vamos, sos irremplazable en KISS...
–Oh, te sorprenderías tanto... Nosotros llevamos de gira por primera vez a AC/DC: se les murió el cantante y consiguieron otro, y más tarde cambiaron al baterista. Yo descubrí a Van Halen: se fue el cantante y pusieron otro, se fue el bajista y consiguieron otro. No hay reglas, todo el mundo puede ser reemplazado.
–Pero KISS sin Paul y vos sería como una banda tributo.
–Para vos, que conocés a los originales. Los nuevos fans sólo juzgarían por lo que ven.

CLINTON, BUSH Y OBAMA
Voto demoníaco
—¿Qué opinás de las primeras decisiones de Barack Obama como presidente de Estados Unidos?
—Lo primero que tengo que decir es que en Estados Unidos todo es posible. Imaginate que el padre de Obama vino de Kenia, Africa: vivimos en un mundo racista, pero en Estados Unidos podés ser presidente. El mundo soporta muchos problemas, así que Obama tendrá mucho trabajo. ¿Si espero que le vaya bien? Claro, pero no podrá hacerlo solo, todos vamos a tener que ayudar.
—¿Votaste por él?
—Sí.
—Antes habías votado por Bill Clinton y George W. Bush, siempre la pegás con los que ganan. ¿Sentiste que era necesario un cambio?
—Mirá, la vida es así... Si vas a meterte de noche en una favela y tenés la posibilidad de llevarte un perro, ¿vas a elegir un chihuahua o un perro grandote, amenazador y violento? El chihuahua está bien para cuando vas a visitar a tu madre, pero no para meterte en la favela. Por eso, para tiempos de guerra, George W. Bush; para los de paz, Clinton u Obama.
—¿O sea que se vienen años de paz?
—Sí.
Entrevista publicada en el Suplemento "No" de pagina 12